
PODER DE LOS PENSAMIENTOS EN ESTRUCTURAR EL CARÁCTER
Actualizado: hace 3 días
«El carácter [ ya sea noble o vil ] es construido en la misma forma en que una ciudad es edificada... la ciudad es construida con millones y millones de ladrillos, y mediante la suma de millones y millones de pensamientos, la mentalidad y el carácter de una persona son edificados...
... Roma no fue construida en un solo día, y la calidad del carácter que Buda, Shakespeare o Platón desarrollaron, no fue el producto de una evolución que solamente les tomó un breve período de tiempo... Por lo tanto:
La mente es la infalible tejedora del destino, el pensamiento es el hilo, los actos buenos o malos constituyen la trenza del tejido y la tela tejida sobre el telar de la vida es el carácter»
James Allen
PODER DE LOS PENSAMIENTOS EN
CONFIGURAR EL DESTINO
«Sembramos un pensamiento y cosechamos un acto. Sembramos un acto y cosechamos un hábito. Sembramos un hábito y cosechamos un carácter. Sembramos un carácter y cosechamos un destino»
C. A Hall

De manera que nuestros pensamientos, actos y hábitos, configuran un carácter noble y virtuoso o uno vil y vicioso con un destino feliz o miserable según sus naturalezas.
«El más mínimo pensamiento ya sea bueno o malo cambia la estructura cerebral dejando su revelador trabajo. Cada pensamiento que se repite tiende a configurar un hábito. Entonces si sostenemos en la mente un pensamiento con persistencia hasta que llegue a formar surcos en el tejido cerebral, tal pensamiento cambiará nuestro carácter en la dirección en que el nos ha conducido»